Entre algunas de las molestias más comunes del embarazo se encuentra el ardor de estómago. Un alimento que puede ayudar a aliviarlo es el plátano. Te explicamos por qué.
​El ardor de estómago es un malestar que, en los últimos meses de embarazo, afecta a muchas mamás. Fraccionar las comidas durante el día y evitar tumbarse después de comer sirve para combatir las molestias. Sin embargo, comer un plátano también puede ayudar a aliviar estas regurgitaciones ácidas.

El plátano, un antiácido natural
Si, desde el perfil nutricional, el plátano se caracteriza por sus propiedades beneficiosas (una pieza de esta fruta de unos 200 gramos proporciona más de 30 gramos de carbohidratos, que proporciona una cantidad destacable de energía fácilmente asimilable), los plátanos también poseen una característica especial. El plátano actúa directamente en las paredes gástricas, estimulando la producción de una capa de mucosidad capaz de protegerlas de la acción del ácido clorhídrico y de la pepsina. Si se come después de las comidas, un plátano no sólo no hace que la digestión sea más pesada, sino que también actúa como un eficaz antiácido sin efectos secundarios.

Además, por su contenido en potasio, los plátanos son buenos para prevenir los calambres, combatir el cansancio y la hipertensión. Asimismo, aportan una discreta cantidad de serotonina, que incide de forma positiva en el estado de ánimo. Este conjunto de cualidades convierten al plátano en una fruta a medida de las mamás.