¿Sequedad en los ojos? ¿Vista cansada? ¿Las embarazadas pueden estar muchas horas delante del ordenador sin que sus ojos se resientan? Te lo explicamos.
Durante el embarazo, debido a causas de tipo hormonal, la cantidad de lágrimas se reduce y también disminuye el componente acuoso de la lágrima. Por otro lado, independientemente de si se está embarazada o no, cuando se pasan muchas delante del ordenador, se reduce la frecuencia del parpadeo espontáneo, que tiene la importante función de lubricar la córnea. Todos estos factores pueden ocasionar una mayor sequedad en los ojos, que resulta muy molesta, sobre todo, si la mujer utiliza lentes de contacto, ya sean duras o blandas.

En el caso de la lentillas duras, éstas tienden a "flotar" sobre la superficie de la córnea, como si tratase de una barca sobre un lago: si la superficie está más seca, la lente podría bloquearse y no secundar los movimientos oculares normales de los ojos. En el caso de las lentes de contacto blandas, al ser hidrófilas, necesitan la hidratación lagrimal de forma continuada, pues, de otro modo, podrían crear un efecto ventosa, que provocaría la disminución temporal de la oxigenación de la córnea.

Por otro lado, conforme el embarazo avanza, la barriga aumenta de volumen y, como consecuencia, la futura mamá también cambia la postura que adopta delante de la pantalla del ordenador. Si la visión de la mujer es buena o si los posibles defectos de su visión están corregidos con el uso de unas lentes adecuadas, esta situación no ocasiona ningún problema. Sin embargo, en el caso de que la futura mamá sufra una miopía que no esté corregida, ésta tenderá a inclinarse hacia delante, mientras que, si sufre de hipermetropía no diagnosticada, tenderá a alejarse de la pantalla y a arquear la espalda para ver mejor, adoptando en ambos casos una postura que no es natural, que está forzada.

Para finalizar, hay que subrayar que, durante los últimos meses de embarazo, también es bastante común que se produzca un descenso en los valores del hierro, lo que puede provocar mayor cansancio en los ojos (astenopía) y una disminución de la calidad de la imagen, provocadas por el menor aporte de oxígeno.

Qué hay que hacer
- Programar una visita al oculista para excluir posibles defectos visuales o para que nos prescriba unas gafas apropiadas, con el fin de no cansar la visión y poder adoptar una postura correcta y cómoda delante del ordenador.

- Cuando estés sentada delante del ordenador, controla que tus ojos estén situados un poquito por encima del borde superior de la pantalla, con el fin de mirar el monitor de arriba hacia abajo. De este modo, evitarás sobrecargar las vértebras cervicales.

- De vez en cuando, aparta los ojos del ordenador y lubrifica a menudo la superficie de la córnea, parpadeando. Si notas que tienes los ojos muy secos, utiliza lágrimas artificiales: son totalmente inocuas, incluso durante el embarazo, y resultan muy útiles para favorecer la hidratación del ojo en el caso de llevar lentillas.

- Corrige tu postura cuando sea necesario y recuerda que debes estar a una distancia de unos 40-50 cm del ordenador.

- El lugar de trabajo no debe tener superficies reflectantes y la luz no debe estar dirigida directamente sobre el monitor. Por tanto, la ventana no debería estar detrás de nuestra, sino en una pared lateral o delante de nosotros (si te molesta la luz de delante, siempre puedes bajar un poco la persiana o poner una cortina).